La desescalada en el deporte: ¿Cuándo abren los gimnasios? ¿Y las pistas de tenis? ¿Cuándo volverán las pachangas?
Muchas dudas y alguna certeza en el plan del Gobierno para la vuelta a la práctica deportiva no profesional
Vuelve la vida, vuelve el deporte, pero ¿Cuándo? Mientras el Plan de Desescalada presentado este martes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, delimitó los tiempos bajo los cuales regresará la Liga de fútbol, la práctica amateur quedó en una nebulosa. ¿Cuándo podré entrenar en las pistas? ¿E ir a la piscina? ¿Y al gimnasio? ¿Y jugar al tenis? ¿Y al pádel? ¿Y organizar una pachanga de baloncesto o de fútbol con los amigos? Hay muchas dudas sobre el proceso, incluso en el propio Consejo Superior de Deportes (CSD), pero también varias certezas. "Hemos adoptado dos criterios. Primero, si el deporte es individual o por equipos y segundo, si se practica al aire libre o bajo techo. Esos dos criterios marcan si se sitúan en una u otra fase", apuntan desde el Gobierno. Las dudas que se pueden despejar son las siguientes:
Fase 0: Atletismo, ciclismo, patinaje o surf
Los deportes que se pueden practicar por la calle o por la carretera, sin contacto y de manera individual serán los primeros beneficiados. Entrarán en la fase 0 de la desescalada, aunque como ya determinó el presidente del Gobierno no tendrán que esperar al lunes 4: podrán empezar el sábado 2. En el Plan de Desescalada sólo se resuelven dos preguntas que mantenían los aficionados desde el anuncio de Pedro Sánchez el pasado sábado. Sí, se podrá montar en bici. Y sí, la mascarilla estará recomendada. Se deberá utilizar "cuando sea posible", especifica el documento. En el texto se señala el surf como ejemplo, aunque las playas continuarán cerradas, lo que podría abrir la puerta a los practicantes de la natación en mar abierto o incluso, como ocurre en Italia, de deportes náuticos como la vela, el paddle surf...
Fase 1: Tenis, golf, gimnasia o artes marciales sin contacto
En
la fase 1 comienzan las incertezas. Sólo hay un punto claro: se
reabrirán las instalaciones al aire libre para los deportes individuales
sin contacto, es decir, las pistas de atletismo, las pistas de tenis o
los campos de golf. En esta categoría podrían entrar las piscinas
descubiertas, pero según el CSD ese es un detalle aún por estudiar. El
documento especifica que al mismo tiempo se podrán abrir centros
deportivos con cita previa sin contacto y sin utilizar los vestuarios,
pero no es el momento todavía de los gimnasios. Lo sería de la práctica
de la gimnasia, de artes marciales como el kárate y poco más. Es una
medida para abrir los Centros de Alto Rendimiento que podría beneficiar a
los aficionados a esas especialidades, aunque todavía se debe
determinar.
Fase 2: Natación y deportes de "bajo riesgo"
La fase 2 es la más inespecífica para el deporte no profesional. Contempla la apertura de instalaciones cerradas sin público y para "deportes en los que no exista contacto o el riesgo de contagio sea bajo". Considerar qué es un riesgo de contagio bajo es una tarea para la que el CSD exige un tiempo. "Hay que tener en cuenta que para llegar a esa fase todavía quedan varias semanas", aceptan, aunque se entiende que la prudencia será la tónica. Es improbable que se acepten partidillos de fútbol sala o de baloncesto, por ejemplo. ¿El pádel? Podría ser. En todo caso, sí se podría permitir la apertura de piscinas cubiertas para la natación, aunque en estos casos tendrán mucho que decir los Ayuntamientos.
Fase 3: El momento de los gimnasios
En la fase 3 se acepta que se incorpore el público de manera muy limitada si hay algún tipo de competiciones de los deportes antes especificados -otra medida pensada para el deporte profesional-. En esta medida sólo se habla de gradas, pero desde el Gobierno se concreta que también entrarán los gimnasios. Abrirán sin posibilidad de que se utilicen los vestuarios y con un tercio del aforo. Con ello, se supone que el resto de deportes, es decir, aquellos que se practican por equipos y con contacto como el fútbol o el baloncesto deberán quedar para después de la desescalada, es decir, para la llamada 'nueva normalidad'.