Edmund vence a Feliciano López y deja a España nuevamente en manos de Nadal

Se impuso por 6-3 y 7-6 (3) al toledano, que sustituyó a última hora a Pablo Carreño. Gran Bretaña domina por 1-0 la eliminatoria.
Minutos antes del
inicio del primer partido, se anunciaba la presencia de Feliciano López
como sustituto de Pablo Carreño para medirse con Kyle Edmund. El
asturiano era oficialmente el jugador llamado a abrir el cruce de
semifinales ante Gran Bretaña, pero, al parecer debido a unas molestias
en el pie izquierdo, Bruguera tuvo que optar por alinear al zurdo.
Carreño admitió que no había estado a la altura física ni mentalmente en
su encuentro del viernes contra el argentino Guido Pella, que le
derrotó en tres sets, pero se encontraba en el gimnasio realizando el
preceptivo calentamiento poco antes del inicio de la eliminatoria.
España
tiene un serio problema con el número dos. Roberto Bautista, que
abandonó la concentración el jueves por el agravamiento de la enfermedad
de su padre, fallecido horas después, cayó ante el ruso Andrey Rublev
el martes. Nadal, ya habitual en los partidos de dobles, es un seguro de
vida, pero en determinadas circunstancias puede no ser suficiente.
A sus 38 años, Feliciano López, director del Mutua Madrid Open, está cada vez más cerca de la retirada. Se volvió a dar el gusto de ganar Queen's el pasado verano, pues su tenis adquiere mayor homologación sobre la hierba. Ha sido un buen jugador, con participaciones notables en las cuatro Copas Davis que ganó con España, como en la final disputada en Mar del Plata ante Argentina, donde venció a Juan Martín del Potro y arañó junto a Fernando Verdasco el punto del dobles. El problema, como quedó de manifiesto ante Edmund, que le venció por 6-3 y 7-6 (3), es que ahora mismo no ofrece grandes garantías a título individual.
El británico, que ha solventado en dos sets sus cuatro partidos esta semana, le colocó tres saques directos en el primer juego, un anuncio de la contundencia con que iba a desenvolverse. Edmund jugó con enorme precisión, buscando a menudo las línesas, sin dar respiro a un Feliciano que sólo subsistía con el servicio. Tras un primer set meteórico, el español mejoró y lllegó a disponer de dos pelotas para igualar el partido, con 5-4 y 15-40, pero su adversario las neutralizó con un ace y un saque directo. Puño en alto, el tres veces cuartofinalista de Wimbledon, buscó la complicidad de una hinchada que le adora. No concedió Edmund, cada vez más en sintonía con el jugador que alcanzó las semifinales del Abierto de Australia el pasado año.